Siempre necesitamos de alguien.

Cuantas veces necesitamos de alguien, cuantas veces es necesaria esa palmadita en nuestro hombro, palmadita redentora que nos viene como “anillo al dedo” como se suele decir. La mayoría de las veces, estamos encerrados en nosotros mismos y no nos damos cuenta de lo que tenemos a nuestro alrededor. Somos egoístas?, no lo se pero de verdad que lo parece, los tiempos han cambiado y los avances tecnológicos, han dado paso a una sociedad menos necesitaria y más autosuficiente en varias facetas cotidianas. Por poner un ejemplo, de siempre en los pueblos y concretamente en las labores del campo, se necesitaba siempre de la ayuda de los vecinos. Esa ayuda, se traducía en amistad , pero una amistad de la buena, de la de siempre, no una amistad descafeinada.

No solamente en los pueblos, en las capitales pasa otro tanto de lo mismo, bloques y bloques de viviendas, gentes de un lado para otro como zombies, con su mirada fija en sus cosas, mirando al frente despreocupándose totalmente de lo que está pasando alrededor, llegando incluso a no enterarse en su entorno de las cosas más simples que suceden. En nuestro portal, no conocemos a nuestros vecinos, ni tampoco nos importa mucho, ni nos preocupa en exceso si bajan o suben. Si bien es cierto que a veces, para ver lo que hay que ver, es mejor no ver, pero en fin.
Después de esta pequeña exposición, que podía ser mucho más grande, solamente me queda decir y siempre generalizando, sin mirar a nadie. Hemos cambiado?, pues claro que sí, enclaustrados en nosotros mismos, como los moluscos en el bajamar. Con nuestros miedos y nuestros temores, no se a qué, no se a quién, pero es así. Os animo a partir de hoy, sin más tardar a intentar relacionaros y hablar con el capullo del 5º, si ya sé que es un poco eso, pero igual no sabemos por qué y tiene remedio. Intentar de alguna manera querer comprender al que tienes a tu lado todos los días, es difícil si, hay casos perdidos y no somos salvadores de almas, creo pero también es verdad que por intentarlo de alguna manera, no perdemos nada.
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