Resulta paradójico que debido a la crisis que nos está afectando en estos tiempos, todos aquellos anti-clericales y por así decirlo anti todo lo que huele a Iglesia Católica, sea hoy en día los que tienen que acercarse a Cáritas Diocesana para que sean “auxiliados” y puedan llegar a final de mes. Algunos agacharán la cabeza, dado que han echado perrerías de curas y monjas, otros debido a su soberbia la mantendrán muy alta “allá ellos”.
Solamente hago esta pequeña reflexión no para demostrar nada, sino para recordar que el tiempo nos pone a todos en nuestro sitio. Como decía el refrán “Siéntate a la puerta de tu casa y verás pasar el cadáver de tu enemigo”, que sabios son los dichos y refranes populares. Estoy seguro que ninguna monja de las encargadas de la ayuda pregunta a nadie por su creencia religiosa, sino que ayudan desinteresadamente. Cuanto tenemos que aprender en esta vida, por lo menos en lo que a la humildad se refiere.
3 comentarios:
Bueno, yo soy una de esas personas totalmente anti-iglesia pero eso no quita que reconozca que como en todos los círculos hay gente buena y mala. Lástima que en este caso los buenos sean tan pocos.
Lo de los refranes... lo pondria un poco en cuestión, que estan llenos de prejuicios y estereotipos... así que ojo con ellos!!
Y sólo faltaba que nos preguntarán por nuestras creencias al solicitar ayudas... Que tendrá que ver encontrarse con dificultades económicas y la opción religiosa que tenga. Y por otro lado, hay que recordar que la mayoria de la entidades, entre ellas Cáritas, recibe subvenciones de diversas administaciones.
Joo, como se alarga esta jo... crisis,,esta reflexion ya la hiciste en el 2009.
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